Vitamina D y el sol

La importancia de la Vitamina D

La vitamina D es también conocida como la vitamina del sol. Su principal función es la de favorecer la absorción de calcio y fósforo desde nuestra dieta y de esta forma mantener una estructura ósea saludable.

La vitamina D ayuda a aumentar la cantidad de calcio que el intestino puede absorber de los alimentos ingeridos en el torrente sanguíneo. También modifica la actividad de las células óseas y es importante para la formación de hueso nuevo en niños y adultos.

Su déficit se relaciona con:

  • Osteomalacia (adultos): Dosis más altas de vitamina D pueden ayudar a prevenir la osteoporosis, las caídas y las fracturas en los adultos mayores.
  • Raquitismo (niños):  El déficit de vitamina D en los niños se caracteriza por un retraso en el crecimiento y unos huesos largos blandos, débiles y deformados que se doblan y arquean bajo su peso cuando los niños empiezan a caminar.

 

Vitamina D y el sol

Cómo obtener Vitamina D 

Con la exposición al sol:

La principal fuente de vitamina D proviene de la exposición de la piel a la luz solar a través de los rayos ultravioleta de tipo B (UVB).

Tomando el sol de forma responsable podrás obtener los beneficios de la vitamina D, pero no aumentar el riesgo del cáncer de piel ni el envejecimiento prematuro cutáneo, más horas al sol no significan necesariamente más vitamina D.

En España, la radiación biológica efectiva para lograr niveles óptimos de vitamina D se da en las horas centrales del día, que es también la radiación que más eritema produce. Este tipo de radiación solar es también la que más contribuye al desarrollo del cáncer de piel, por lo que es muy importante saber cuánto tiempo nos debemos exponer a la misma.

Por otra parte, es importante saber que la exposición a la luz a través de las ventanas es insuficiente porque el vidrio bloquea casi por completo la luz UVB.

Se pueden producir cantidades adecuadas de vitamina D con una exposición moderada al sol en la cara, los brazos y las piernas (para los que tienen la piel más clara). Esto significa en términos generales que es suficiente con una media de exposición al sol de 5 a 30 minutos entre las 10-12 horas. 

 

 

Con alimentos que contienen vitamina D

A excepción de los hígados grasos de pescado, muy pocos alimentos contienen vitamina D de forma natural. algunas de estas fuentes alimenticias buenas son la yema de huevo y algunos tipos de pescado, como el salmón y la caballa.

 

El hígado y los riñones convierten la vitamina D (producida en la piel y absorbida en la dieta), en la hormona activa, que se llama calcitriol o 1,25(OH)2D. Ésta es la forma activa, esteroide-hormonal, de la vitamina D.

El calcitriol interactúa con el receptor de la vitamina D, que se encuentra en casi todas las células del cuerpo. Cuando la forma activa de la vitamina D se une a este receptor, activa o desactiva los genes, provocando cambios en las células. Esto explica porque la vitamina D tiene tantas funciones en nuestro organismo.

La deficiencia de vitamina D puede ser causada por diferentes motivos:

  • No obtener suficiente vitamina D en la dieta o mediante suplementos
  • No absorber suficiente vitamina D en el tracto digestivo. Como puede pasar con algunas condiciones como la enfermedad celíaca, enfermedad inflamatoria intestinal y después de cirugías bariátricas, entre otras.
  • Problemas para producir vitamina D a partir de la exposición de la piel a la luz solar
  • Problemas con el proceso de conversión de la vitamina D en su forma activa (calcitriol). Como en pacientes con enfermedades hepáticas y renales.
VITAMINA D E IMPLANTES

Vitamina D e implantes dentales

Como ya hemos dicho la vitamina D contribuye y ayuda a  la absorción del calcio y aumenta la integración entre el hueso alveolar y el implante. Debido a su importancia en el desarrollo óseo y la mineralización, la vitamina D tiene un papel crucial en el éxito de los implantes dentales y, su déficit y las patologías derivadas de éste, pueden convertirse en motivo del fracaso de un implante dental o en una contraindicación para este tipo de tratamientos.

Hoy en día, los implantes dentales se han convertido en uno de los mejores tratamientos para reemplazar los dientes perdidos, desde un punto de vista funcional y estético.

Los implantes dentales empleados actualmente no solo tienen como objetivo lograr una función masticatoria idéntica a los dientes originales, además de lograr que la apariencia sea tan natural y bella como los dientes originales y sanos. La pérdida de uno o más dientes crea sonrisa asimétrica que no solo afecta a la estética sino también a la función de masticatoria y a su vez, puede modificar su hábito dietético.

Aunque estos no son problemas graves, a veces la pérdida de dientes también puede conducir a la pérdida ósea. Cuando se pierde un diente, el hueso alveolar comienza a reabsorberse y se debilita debido a la falta de estímulo.

La pérdida de dientes también cambiará la anatomía facial, causando un aspecto prematuramente envejecido. La colocación del implante no solo mantiene restaura la sonrisa natural, sino que también reemplaza los dientes que faltan y previene la recesión del hueso alveolar. Hay muchos factores que se utilizan para determinar si la situación del hueso es adecuada para la colocación de implantes o no, y uno de ellos es la densidad ósea. La densidad del hueso está directamente relacionada con los depósitos de calcio y de vitamina D.

Fuentes de información:
https://www.sebastianpodlipnik.com/
https://cimev.es/vitamina-d-implantes-dentales/