La salud en Otoño. Dental Attitud

Cómo disfrutar de esta estación tan bonita

El otoño trae consigo cambios en el clima y en el entorno que pueden afectar la salud en general. Aquí tienes algunos factores clave a tener en cuenta para mantenerte saludable durante esta estación:

El frio y las bebidas calientes

Las temperaturas suelen bajar, lo que puede hacerte más propenso a resfriados y gripes. Es importante abrigarse adecuadamente. También nos apetece tomar bebidas calientes como el té o el café.
El café contiene taninos, un tipo de polifenol que tiende a adherirse al esmalte dental, lo que provoca manchas amarillas o marrones con el tiempo. Cuanto más oscuro y fuerte sea el café, mayor es la probabilidad de que cause manchas. Aunque se suele pensar que el té es menos dañino para la coloración de los dientes, también contiene una alta concentración de taninos. De hecho, ciertos tés, como el té negro y el té verde, pueden manchar los dientes de manera más pronunciada que el café debido a su composición.
¿Qué hacer para minimizar estos efectos? Recomendamos enjuagar la boca con agua después de consumir té o café para eliminar los residuos que puedan manchar y mantener una buena rutina de higiene bucal, como cepillarse los dientes al menos dos veces al día y usar hilo dental.

Fortalecer el sistema inmunológico:

Durante el otoño, los virus como el de la gripe tienden a ser más comunes. (es recomendable vacunarse contra la gripe en otoño para prevenir complicaciones, especialmente en personas mayores, niños, y aquellos con enfermedades crónicas o un sistema inmunológico debilitado). Fortalece tu sistema inmunológico consumiendo alimentos ricos en vitamina C (como cítricos, pimientos y fresas) y otros alimentos ricos en zinc como las semillas, frutos secos, mariscos y carne magra. El zinc es crucial para la producción y el funcionamiento de las células inmunes. Y alimentos ricos en probióticos, los yogures, el kéfir, el kimchi y otros alimentos fermentados ayudan a mantener un intestino saludable, donde reside una gran parte del sistema inmunológico.

En otoño, pueden aumentar las ganas de consumir comidas más pesadas y reconfortantes. Asegúrate de equilibrar estos alimentos con opciones saludables ricas en fibra, frutas y verduras de temporada .

Mantener una hidratación adecuada:

Aunque el clima sea más frío, la hidratación sigue siendo esencial. Bebe suficiente agua para mantener el cuerpo funcionando correctamente, incluso cuando no sientas tanto calor.

Cuidado de la piel:

El aire más seco en otoño puede afectar la piel, haciéndola más propensa a la sequedad. Utiliza cremas hidratantes adecuadas y no olvides proteger la piel del sol, aunque los rayos UV parezcan menos intensos.

Controlar las alergias estacionales:

Durante el otoño, muchas personas experimentan alergias debido a la acumulación de moho, esporas y polvo. Mantén tu casa limpia y ventila los espacios cerrados. Si sufres de alergias, consulta a un médico sobre el uso de antihistamínicos.

Ejercicio físico:

El clima más fresco puede desmotivarte a hacer ejercicio al aire libre, pero es importante mantenerse activo para mantener una buena salud cardiovascular y fortalecer el sistema inmune. Intenta adaptar tus rutinas al ambiente, ya sea con caminatas, ejercicios en casa o en gimnasios.

Manejo del estado de ánimo:

La reducción de las horas de luz solar en otoño puede afectar el estado de ánimo, contribuyendo a una condición llamada trastorno afectivo estacional (TAE). Intenta exponerte a la luz natural tanto como sea posible, mantén una rutina activa y busca apoyo si sientes tristeza o fatiga constantes.

Descanso adecuado:

Con los días más cortos y noches más largas, es posible que necesites ajustar tus patrones de sueño. Mantén una rutina regular de descanso para asegurar una buena calidad de sueño y ayudar a tu cuerpo a adaptarse al cambio de estación.

Teniendo en cuenta estos factores, podrás mantener un buen estado de salud durante el otoño y disfrutar plenamente de esta estación