La diastema, el bruxismo y la xerostomía, ¿Qué son?
La diastema, el bruxismo y la xerostomía, son términos que igual no reconozcs pero seguro que si conoces sus sintomas porque son afecciones de la salud bucodental muy frecuentes.
La diastema es el espacio entre dos o más dientes que presentan algunas personas, y se observa con mayor frecuencia en los incisivos superiores. Es un defecto de la posición de los dientes pero no por eso ha dejado de ser una característica atractiva en algunas modelos o artistas.
Puede producirse por varios motivos como la sobremordida, un crecimiento irregular de las piezas dentales, frenillo labial más largo de lo normal o por el acto involuntario que tienen algunos niños de apretar la lengua contra la cara interior de los dientes.
Esta afección no siempre supone problemas graves, las más abituales son las caries por la acumulación de placa entre los dientes. Dolor: el diastema puede conllevar una mala mordida de los alimentos y ello desencadenar dolores de cabeza, mandíbula, oído y cervicales. Problemas de pronunciación: por eso, aunque el diastema es frecuente durante la infancia, si perdura tras la fase de desarrollo es importante acudir a un dentista para valorar si es necesario un tratamiento.
Las visitas periódicas al dentista son fundamentales para controlar la evolución del diastema, especialmente en las fases de renovación de los dientes y desarrollo de los mismos. Hay que valorar el tratamiento en cada caso.
¿Qué es el bruxismo?
Las personas que lo sufren, aprietan los dientes superiores contra los inferiores de manera muy fuerte, al mismo tiempo que los mueven hacía delante y hacia atrás.
Normalmente esta acción se realiza de forma inconsciente y generalmente durante las horas de sueño, aunque en ocasiones también a lo largo del día. Esta presión constante puede provocar el desgaste progresivo de las piezas dentales.
La causa principal de esta afección es el estrés, aunque pueden influir tambien otras circustancias para su aparición como la oclusión dental defectuosa, una alimentación deficiente, ¡siempre aconsejamos tener una dieta equilibrada! No dormir las horas suficientes, y tener alteraciones posturales, malas posturas o sufrir algún tipo de desviación en la columna vertebral. La columna vertebral y los músculos de las espalda están involucrados en la mayoría de movimientos corporales y una tensión negativa o una colocación incorrecta es capaz de producir fuertes dolores de cabeza y bruxismo, entre otros.
El bruxismo se trata normalmente con una férula de descarga. Se toman medidas de los dientes y se crea una cubierta protectora, que suele ser de plástico o resina, y que evita que se produzca la presión diente contra diente. Con ello, el desgaste de las piezas dentales por el rechinamiento, se elimina.
La xerostomía
Es la sensación de sequedad bucal que experimentan algunas personas. Esta es constante y produce un gran malestar.
El motivo es un mal funcionamiento de las glándulas salivales, que provoca una disminución progresiva en la producción de saliva, muy necesaria para la limpieza de la cavidad oral, la regulación de las bacterias que se acumulan en la boca, o la preparación y desarrollo de la digestión.
Hay dos tipos:
la xerostomía reversible, que tiene tratamiento y puede paliarse, y la xerostomía irreversible que se da en casos de pacientes con ciertas enfermedades graves que producen daños irreparables en las glándulas salivales.
Esta afección produce otros sintomas derivados de la sequedad como alteraciones del sabor, tener mucha sed, dolor de lengua, fisuras y grietas en los labios…
Las causas principales que la producen son el consumo habitual de tabaco y alcohol, el uso de medicamentos como los antidepresivos, antihistamínicos, relajantes musculares. Tratamientos como quimioterapia y radioterapia. Artritis, diabetes, depresión…
Es importante mantener la boca hidratada e intensificar al máximo la higiene bucodental.